Hhace algo más de dos años, Rihanna decidió denunciar a su progenitor por aprovecharse de su fama y hacer negocios en su nombre. No obstante, su historia se ha solucionado mucho más rápido que la de su compañera de profesión Britney Spears, ya que la de Barbados ha decidido retirar la demanda unos días antes de que se iniciase el juicio.
Los titulares sobre lo que estaba ocurriendo con la cantante de Umbrella y su padre, Ronald Fenty, aparecieron en enero de 2019. Rihanna lo había denunciado tras enterarse de que había montado una empresa llamada Fenty Entertainment con la que estaba haciendo negocios fraudulentos, haciéndose pasar por representante de su hija.
De hecho, trascendió que el hombre había llegado a acordar una gira por Latinoamérica de una quincena de conciertos que le iban a proporcionar unas ganancias millonarias. Teniendo en cuenta que Fenty, el nombre familiar, es el mismo que la artista ha usado para lanzar su línea de cosméticos y lencería, y sabiendo que Ronald era su padre, es fácil de imaginar que los empresarios no sospechasen de que Rihanna no tenía ni idea de los negocios fraudulentos de su padre.
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Rihanna confirmó en una entrevista con Oprah Winfrey que había logrado perdonar a su padre por todo lo que había hecho en el pasado.
Cuando se enteró, decidió ir por la vía legal y ponerle una demanda. La relación de Riri y su progenitor siempre ha sido difícil. Sus adicciones y los malostratos contra su madre marcaron la infancia de la artista hasta que cuando tenía 14 años se separaron y él dejó de vivir con ellas.
